La Vinotinto está completando una Copa América bastante exitosa dentro de lo que cabe. El plantel entrenado por Rafael Dudamel se ha clasificado como segunda de grupo por detrás de Brasil, con la que empató a cero. De momento se les puede pedir poco a los chicos de la selección venezolana, y más teniendo en cuenta lo que ha sido el equipo nacional históricamente en este torneo.
- La actual selección venezolana;
- los subcampeones del mundo sub-20;
- una historia de fracasos que se va a dar la vuelta.
La actual selección venezolana
Rafael Dudamel ha construido un equipo serio, al que es muy difícil meterle mano y que, encima, cuenta con delanteros realmente peligrosos para el contrario. Es decir, no se puede considerar un favorito a llevarse el trofeo, pero sí que es una de las selecciones más peligrosas para cualquiera que se enfrente a ella.
De hecho, una de las mejores apuestas de la Copa América es la que dice que la Vinotinto consigue alzar la copa, ya que se paga muy bien y no se puede decir que no esté en disposición de dar la gran sorpresa.
Y esto ya, de por sí, representa un crecimiento importante respecto a otras ediciones, en las que Venezuela partía como uno de los equipos más débiles y quedaba demostrado durante el torneo.
Pero eso no se va a ver más. Habrá selecciones mejores y peores a lo largo de los años; sin embargo, nunca más será esa perita en dulce, ese convidado de piedra que iba a los torneos a no salir goleado.
Los subcampeones del mundo sub-20
En 2017 Venezuela consiguió algo histórico. Al fin una selección nacional jugaba una final de un campeonato de la FIFA. Fue la final del Mundial Sub-20 celebrado en Corea del Sur.
Después de quedar encuadrados en el Grupo B con México, Alemania y Vanuatu, y ganar los tres partidos, se clasificaron como primeros de grupo, enfrentándose a Japón en octavos de final y ganando 1-0. En cuartos ganaron en la prórroga a Estados Unidos por 2-1 y en semifinales se deshicieron de Uruguay en los penaltis tras empatar a 1.
La final, jugada el 11 de junio de 2017, proclamó campeón a Inglaterra y consagró a una selección juvenil venezolana que está preparada para cosas mayores. De hecho, de los que logaron la hazaña en 2017 hay varios convocados para esta Copa América: Jan Hurtado, Junior Moreno, Pablo Bonilla y Samuel Sosa.
Debido a este subcampeonato y a las buenas actuaciones de la actual selección venezolana de fútbol, se entiende el optimismo del pueblo que ve cómo por fin su equipo nacional está preparado para competir con los mejores del continente.
Una historia de fracasos que se va a dar la vuelta
Como casi todo el mundo sabe, Venezuela no ha parado de ir de fracaso en fracaso en la mayoría de las ediciones de la Copa América de la CONMEBOL que ha disputado. De hecho, cuando más cerca ha estado de la final fue en la edición de 2011, en la que cayó en semifinales por 4-1 ante Perú en un campeonato en el que quedó segundo de grupo tras Brasil…Sí, igual que en esta edición.
Además, en la pasada edición centenario de la Copa América, la de 2016, llegó a los cuartos de final, por lo que es evidente su mejora respecto a décadas pasadas, en las que solía ser el rival al que todos querían enfrentar por la fragilidad de su defensa y su inoperancia en el taque.
Pero el gran éxito está cerca. Clasificarse para una Copa del Mundo se ve mucho más claro que antes, gracias a la nueva hornada de futbolistas que se están fogueando en las mejores ligas del mundo. Ese salto de competitividad se está produciendo y a pocos sorprendería que en 2022 llegue a Catar.
Porque a igualdad de calidad, a igualdad de competitividad, y a igualdad de táctica, los que tienen más ilusión ganan. Y nadie tiene más ilusión que esta gran selección de Venezuela.